¿Quieres aprovechar al máximo tu aire acondicionado en verano, sin disparar el consumo eléctrico y manteniendo un ambiente seguro y cómodo? Aquí te explicamos cómo usar el aire acondicionado en verano.
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Temperatura ideal del aire acondicionado en verano
Para el verano, la temperatura ideal del aire acondicionado es de 24°C. Este ajuste es suficiente para mantener la frescura en la habitación sin que el ambiente sea demasiado frío.
Ajustar el termostato a esta temperatura para optimizar el consumo energético y mejorar la eficiencia del aire acondicionado.
¿Por qué NO ajustar el aire acondicionado a 22°C o menos?
Poner el aire a una temperatura muy baja como 22°C puede provocar incomodidades y afectar la salud.
El ambiente frío reduce la humedad del aire y si es excesivo puede resecar la piel y las vías respiratorias.
Además, el organismo podría reaccionar con congestión nasal, aumentando el riesgo de resfriado.
Mantén la temperatura en 24°C. Es la mejor forma de equilibrar comodidad y salud.
Recomendaciones para usar el aire acondicionado
Para disfrutar de un aire acondicionado seguro y saludable en verano, sigue estas recomendaciones clave:
1. Establece la temperatura adecuada: Mantén el equipo a 24°C para evitar cambios bruscos de temperatura.
2. No uses el aire acondicionado durante largas horas: Esto evita la resequedad en ojos y piel. Considera apagarlo o bajarlo cuando el ambiente esté lo suficientemente fresco.
3. Mantén el equipo limpio: El filtro de tu aire acondicionado acumula polvo y suciedad. Limpiar el filtro al menos una vez al mes asegura un aire fresco y saludable.
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Consejos para usar el aire acondicionado
El uso eficiente de tu aire acondicionado puede reducir el gasto de energía. Aquí tienes algunos tips clave:
1. Cierra ventanas y puertas: Esto evitará la fuga del aire fresco, conservando la temperatura deseada en el interior.
2. Configura el modo «Automático»: En este modo, el equipo regula la temperatura en función del calor exterior, manteniendo el ambiente sin grandes picos de consumo energético.
3. Apaga el aire cuando no estés en casa: Un buen hábito que ahorra energía y evita el uso innecesario del equipo.
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